Calambres, chispas, descargas eléctricas, corriente…da igual el nombre, todos hemos recibido alguna vez una de ellas, la mayoría en pequeñas proporciones (afortunadamente). Pero ¿por qué se nos carga el cuerpo de electricidad? y lo más importante ¿cómo leches se puede evitar?.
Pues aquí una “sufridora” te lo cuenta de primera mano…
MI EXPERIENCIA CON LAS DESCARGAS ELÉCTRICAS
Hace unos días, tuve una experiencia “terrorífica” en el supermercado…
No tuvo nada que ver con Halloween: esto daba miedo de verdad, aunque ahora lo recuerde de una manera cómica.
Debe ser que soy muy eléctrica para todo 😉 (gajes del oficio) y suelo recibir pequeñas descargas de vez en cuando. Sobre todo al salir del coche y cerrar la puerta, me atiza un latigazo que no me hace ni “chispa” de gracia.
Pero lo del otro día fue de manual, llegué a entrar “casi” en situación de pánico, hasta el punto que me daban ganas de acurrucarme junto al palet de las garrafas de aceite (me libré, porque los 34 añazos, se tienen que notar en algo, aunque sólo sea en eso…)
En fin, que iba yo la mar de distraída , llevando el carrito (con niña incluida dentro) por los pasillos del súper, cuando de repente, mi dedo coincidió en un punto donde se encontraba uno de los tornillos laterales del asa del carro y recibí un leñazo, que me hizo pararme en seco.
Mi cerebro lo recibió como “el tornillo puñetero da corriente, vete tú a saber por qué, así que no vuelvas a tocar ahí maja”, con lo que me dediqué a seguir con mis compras como si tal cosa.
Fue en la parte de los refrigerados, al meter los yogures en el carro y “rozar” accidentalmente la estructura metálica, cuando me dí cuenta que no era precisamente el tornillo el que estaba electrificado, sino yo y sólo yo (porque mi peque, estaba dentro como si tal cosa).
El resto del recorrido fue un martirio: yo intentando “encestar” los alimentos y agarrar el asa de plástico como si me fuera la vida en ello, mientras los sudores me corrían por la frente…(bueno en realidad, no tenía sudores pero queda más dramático ¿verdad? 😄 )
Por mucho cuidado que puse, hasta que llegué a la caja, me dieron unos tres “fustazos” más y creo que había un efecto rebote o algo, porque sino, no lo entiendo.
Mientras esperaba mi turno, recordé un truco que me dio mi padre, que consiste en tocar las llaves para “descargarse” y que es el que uso normalmente cuando bajo del coche . Por si acaso, intenté no volver a tocar el carro para comprobar si había funcionado (imagínate si echaba humo ya).
Desde luego, la cara de la gente, mirándome sacar las cosas del carro, cual pinza de máquina de peluches en la feria, era impagable.
Tuve que contarles “mis penas” antes de que llamaran al defensor del menor y me pusieran la camisa de fuerza…
En fin, que ahora igual estás llorando de la risa al leerlo, incluso yo al escribirlo, lo hago con una sonrisilla (jeeee, qué divertido) . Pero nada más se abrieron las puertas automáticas y me dio un soplo de aire fresco en los morros, me hice el firme propósito de averiguar por qué y cómo evitar pasar de nuevo por ese suplicio.
CÓMO SE PRODUCE LA ELECTRICIDAD ESTÁTICA
La materia se compone de átomos: estos contienen neutrones y protones en su interior…y electrones dando vueltas alrededor.
Cuando dos cuerpos se frotan, pueden perder parte de protones o de electrones y en este caso los neutrones se convierten en el tipo de carga que más domine (positiva o negativa).
Entonces al crearse una descompensación, es cuando se forma el tangai y ya la hemos liado parda: nos hemos cargado positiva o negativamente (en mi caso muyyyy negativamente) y quedamos electrizados.
Viene siendo una cosa así… + ó – 😉
¿QUÉ CAUSA LA DESCARGA ELÉCTRICA?
La descompensación de carga, busca liberarse para volver a su estado normal. La manera mas común es buscar la tierra (el suelo), pero cuando no puede llegar a ella, por ejemplo, porque el tipo de calzado no le deja pasar, busca otras vías.
Y si entre medias nos encontramos con objetos metálicos, al ser grandes conductores, pues nos toca premio en forma de calambrazo (¡te has ganado un resfriado menos este invierno!).
Cuando te sucede al tocar a una persona, es porque se encuentra tan “cargada” como tú y hay un choque de cargas.
FACTORES QUE DIFICULTAN LA LIBERACIÓN DE LAS CARGAS ESTÁTICAS
- Los tejidos de seda, lana o plásticos, ionizan el cuerpo con facilidad.
- Calzado sintético, porque no permite el paso de la electricidad.
- Pasar mucho tiempo frente al ordenador, acumula carga electroestática (aaaaamigo!).
- Los ambientes secos: el bochorno, sobre todo en verano, dificulta que encuentren el camino al suelo.
CÓMO EVITAR LAS DESCARGAS ELÉCTRICAS EN NUESTRO CUERPO
- Usando prendas de lino o algodón, que absorben mejor la electricidad.
- Descalzarse y pisar el suelo ( si puede ser hierba o tierra directamente, mejor).
- Ducharse es un buena forma de liberar las energías dispares.
- Hidratarse la piel, sobre todo las manos, para dificultar la adhesión de tejidos al cuerpo.
- Abrazar un árbol, pero como no solemos tenerlo “a mano” todo el tiempo, tocar algún objeto de madera: una pinza de la ropa (sin la parte metálica, please) o un lápiz, pueden valer.
- Manosear el llavero, porque el aluminio elimina la electricidad.
Puede parecer una tontería, pero estas descargas eléctricas pueden producir estrés, pequeñas migrañas, cansancio, irritación… así que mejor no ponérselo fácil a la electricidad en estos casos 🙂
Para terminar y liberar tensiones, te dejo un vídeo sobre cómo atraer una lata con un globo imantado.
P.D: la mosca no es que sea metálica, es que le va la marcha 😉
Si te has quedado con ganas de descubrir otras curiosidades, te recomiendo La función de la placa mica y los peligros del microondas.
Me despido por hoy 🙂 ¿qué te ha parecido esta entrada? ¿sufres en silencio los calambrazos? ¿tienes algún truco que no haya mencionado? cuéntame y charlamos en los comentarios.
Que tengas un buen día!
Fuente: La patria
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Me ha pasado en ciertos ocasiones pero solo en mi habitación 🙁 me dan unos sustos que siempre termino gritando en cada chispazo que me da, he leído hoy este post buscando una solución y ya he encontrado acá varias, espero me resulten . Gracias!
He llegado a tu post porque mi hijo lleva dos dias que no para de darnos chispazos. Tiene 5 años y estaba preocupada. Entiendo que no es peligroso no??? Le he dado las llaves de casa por si acaso jaja
Hola Laura, no te preocupes. suele ser por alguna prenda que lleve con un tejido conductor o incluso los zapatos que lleven una suela que no sea aislante. También influye el calor. Espero que se solucione pronto, un saludo.
Me está pasando eso! Y de noche veo los chispazos! Me estresa bastante! Mi ropa está toda eléctrica! Le pase un alfiler de gancho de metal y no sé les va!
Hola Carolina, prueba a meter en el bolso una pinza de madera, de estas que se ponen en la ropa y tócala cuando te notes cargada. También ayuda descalzarse para pisar el suelo y liberar carga. Espero que te sirva, porque son muy molestas. Un saludo.
Creía que era el único, muy buen post, me he reído mucho! A mí me pasa a diario, en el supermercado, al cerrar la puerta del coche (no sé porqué sólo me da a mí el chispazo) e incluso cuando llego a casa e intento meter la llave en la cerradura, salen chispas que se pueden ver perfectamente (y menos mal que el chispazo se lo lleva la puerta, yo ni lo noto). He notado que cuando me pongo camisa estoy “muy cargado”, si tocó un perchero o cualquier objeto metálico me pega el viaje. Probaré con el truco de las llaves, lo desconocía. Gracias!
Me alegro que te hayas reído Alberto, lo mejor es tomárselo con humor. Ahora que comenzaremos con los días cálidos, aumenta el riesgo así que, conviene estar preparados ? Ya me contarás, si te resulta el truco de las llaves. Muchas gracias por comentar 🙂
Me ha encantado tu experiencia. Yo soy muy eléctrica también. Intentaré descargarme, jaja. Me lo he pasado muy bien contigo. Gracias.
Gracias Abigail, me alegro que te haya gustado. Espero que te sirva para ahorrarte algunos calambrazos 😉
Hola, me ha gustado lo que has escrito, porque a mi me suele ocurrir, sobre todo en el supermercado. Voy con una persona que se traslada en silla de ruedas y cuando entramos a comprar y cojo el carro de la compra, cada vez que esta persona me roza o yo le rozo nos da un calambre. No se si es por el carro, porque en el supermercado haya una carga de electricidad estática o vete tú a saber. El caso es que cuando vamos con la silla de ruedas por otro sitio dando un paseo no hay chispazos. Miedo me da ir a comprar. Vicen D.
Te entiendo perfectamente a mí me pasa en el supermercado y cuando conduzco en los días de calor. Un truco muy bueno para evitar las descargas, es tocar las llaves, llévalas en la mano o en el bolsillo y tocalas cuando te encuentres en un sitio con carga eléctrica, viene muy bien para liberarla. Un saludo!